En este diseño para la Taiwan Tower Conceptual Design, SOMA se basa en los sistemas de inteligencia utilizados en los enjambres, creando una lógica de abajo hacia arriba en la geometría. El enfoque de SOMA pretende lograr un aspecto de varias capas, una torre evocadora. A través del uso de procesos de algoritmos en la organización del diseño, se determina el aspecto visual del proyecto. La Torre presenta la futura arquitectura que aprende de la naturaleza y despliega sus principios fundamentales.
La agrupación no jerárquica de las geometrías verticales surge de una base de campo abierto, permitiendo que el pasiaje que rodea fluya libremente entre la estructura. Las fibrosas láminas se entrelazan y se conectan para formar un todo, mientras que se aplica un conjunto de modelos digitales para organizar la estructura performativa de la torre. Los resultados se superponen con los requisitos funcionales y son desarrollados con ayuda de programas de cálculo de estructuras.
En los laboratorios ecológicos los visitantes pueden observar como se produce energía mediante el movimiento y como se transforman en luz por la noche, asemejando a partículas flotantes en los enjambres. Las fachadas se adaptan a las condiciones climáticas al abrir y cerrarse para proteger a los visitantes del sol y el viento. La torre en si misma se convierte en una parte completamente integrada de la exhibición, muestra cómo el uso responsable de los recursos naturales puede llevar a la innovación e investigación arquitectónica que habla sobre la imaginación y las emociones.
Vía: eVolo